Un espacio abierto en el salón no siempre puede ser posible sin una columna sujetando las vigas. También
puede haber un pilar o una viga de techo que nos impida disponer de una pared despejada de obstáculos.
No hay que desesperarse, hay
muchas posibles soluciones para hacer de ese inconveniente un lugar especial o difuminarlo en el resto del espacio.
Si van a
formar parte de una cristalera al exterior una solución puede ser colocar dos cerramientos que sean simétricos para dar una sensación de continuidad. Los perfiles y los estores o cortinas que cubran las cristaleras también deberán ser del mismo tipo y color.
Creando ambientes o separándolos
Si la columna está en mitad de la estancia podemos optar por pintarla del mismo tono que la pared del fondo para que se difumine lo máximo posible en el entorno, pero también podemos decidir
crear un espacio divertido convirtiéndola en el centro de atención con una decoración única.
Un papel decorativo puede crear esa distinción con el resto del ambiente, o podemos
forrarla con un friso que contraste. Hay una gran variedad de decoración imitando distintas texturas: ladrillo, mármol; o también podríamos decorarla con motivos de enredaderas o plantas en vinilo.
Si la columna es suficientemente grande podemos
rodearla de pequeñas estanterías asimétricas a partir de media altura y utilizarlas como estantes decorativos.
También podemos ver si nos puede servir como zona de separación de ambientes utilizándola como
lateral de un pequeño muro con repisa o un pequeño mueble de obra con cajones o armarios.
Jugando con las luces y las sombras
En cuanto a los pilares adosados a paredes, esquinas o techos podemos
pintarlos del mismo color o darlos un tono más oscuro que contraste con el resto de la pared y crear un juego de color utilizando ese espacio que ya es distinto.
También podemos ayudar a convertirlo en un centro de atención decorativo colgando algún objeto especial que llame la atención como un reloj,
una decoración colgante o, incluso, una lámpara o una planta.
Hay que
tener siempre en cuenta el ambiente que queremos darle a la habitación donde está ubicado el pilar. Si es una habitación de niños, podemos aprovechar esa columna y decorarla con colores alegres o con sus dibujos preferidos.
Siempre hay una solución para ese elemento que, al principio, puede parecernos un engorro, sólo
hay que atrevernos a jugar con las texturas, las sombras, el color y darle un aspecto desenfadado y sin complejos.