Hoy en día debido al reducido espacio de las casas (algunas tienen 30 metros cuadrados y da gracias), al nuevo modelo familiar (solteros) y al ritmo de vida acelerado, los comedores separados de la cocina van cediendo sitio a nuevas
alternativas interesantes.
Nos estamos acostumbrado a
comer (si es que el trabajo nos permite comer en casa) con prisas, doblados sobre la mesita baja del salón o en una esquinita; por no hablar de los desayunos de pie apoyados en el fregadero o en la mesa de la cocina que hace mucho dejó de ser mesa para convertirse en encimera en la que hay de todo menos espacio para un plato o una taza.
Por eso cada vez más personas escogen
cocinas en L y en U ya que son muy despejadas, diáfanas y permiten establecer una zona de comidas en el ángulo opuesto al de los frentes o en el centro de la estancia. O islas (que suelen acompañar a las cocinas con forma de L y U) especialmente si se dispone en ella una parte al estilo de barra americana o barra de bar para comer en ella.
Taburetes
Los taburetes se convierten en estos tipos de cocina en un
elemento imprescindible ya que podemos desayunar y comer cómodamente. También son ideales para las reuniones informales de amigos ya que no fuerzan a la gente a estar de pie deambulando por la fiesta o apiñados alrededor de la mesita baja del salón. Y si compras plegables, cuando todo termina, los pliegas y guardas en cualquier sitio sin necesidad de tener que comprar sillas por si vienen visitas y sin necesidad tampoco de tener los taburetes apiñados en una esquina de la barra.
Medidas de los taburetes
Las barras para desayunar suelen ocupar unos 40 cm de anchura y unos 110-115 cm de altura, por eso cuando compres taburetes calcula que el asiento del taburete debería estar a unos
85 o 90 cm del suelo. Si es mayor la altura tú calcula siempre que haya unos 30 cm entre el asiento del taburete y la barra para que no estén los muslos embutidos. En cuanto al ancho, calcula unos
60 cm por persona para que puedan comer cómodamente sin chocar los codos.
Por supuesto puedes comprar más
taburetes plegables si tu intención es aprovecharlos para fiestas o reuniones de amigos como te dije antes. La ventaja que tienen es que podrás llevarlos también a la terraza o a otras habitaciones donde los necesites. En este caso la altura será la que tú consideres más cómoda según la estancia en la que vayas a utilizarlos, ya que si tienes mesita baja en el salón, por ejemplo, no vas a comprar taburetes altos.
Material de los taburetes
Dependerá de la zona de la casa en la que vayas a colocarlos. Si es en la zona de la cocina, especialmente si estarán cerca de donde vas a cocinar, deberán ser de un material resistente y que no se deteriore con facilidad ya que en la cocina hay cambios de temperatura por la condensación del vapor, el horno, la nevera, etc y también hay peligro de que se manche con desperdicios orgánicos, grasa, líquidos o le caiga comida caliente y pueda quemarse si es, por ejemplo, de un plástico malucho.
Los taburetes de
madera son muy resistentes y preciosos para una decoración rústica y los típicos taburetes plegables de madera caben en cualquier sitio y pegan con todo. El mayor inconveniente que presentan es el precio y el peso (aunque ambos dependen de la madera con la que estén hechos, claro está) y que requieren un mantenimiento anual, aunque será menor si están bien tratados.
Los taburetes
lacados son bonitos, resistentes y baratos, de hecho el material lacado suele predominar en las cocinas hoy en día por estos motivos aunque como desventaja decirte que ese precioso color brillante acaba deteriorándose con el tiempo y si bien aguanta los golpes no tanto los arañazos.
Los de
acero inoxidable son modernos, resistentes, duraderos y muy funcionales si eliges un modelo plegable y poco pesado. Dentro de estos modelos hay muchas opciones ya que pueden estar combinados con asientos de distintos materiales.
Los de
PVC son ideales para la zona de la cocina ya que son muy resistentes a la humedad y a los golpes, no se deterioran con tanta rapidez como los lacados ante la acción del sol, y son baratos. La mayor pega es que dependiendo del plástico pueden ser peligrosos si no tienes cuidado y se ven expuestos a la acción del fuego.
Hay decenas de modelos en el mercado así que siguiendo estas
pautas básicas, todo estará en tu gusto personal: con o sin respaldo, alto o bajo, con reposapies o no, de un solo material o varios, de diseño minimalista o con formas, etc