Una buena iluminación puede dar vida a los ambientes más apagados y pueden calmar otros saturados y cargados. La luz
adecuada puede cambiar un espacio, su distribución , el peso... y puede crear momentos inolvidables. Unas simples velas pueden transformar un entorno muy luminoso en algo más intimista, personal.
De todas maneras, no cabe duda que
la mejor luz es la natural, pero nuestro ritmo de vida y muchas veces también laborales, no nos permiten disfrutar de ella todo lo que quisiésemos. Por ese motivo tenemos que recurrir en muchos de los casos a iluminar nuestro hogar lo mejor que sabemos y teniendo muy claro lo que queremos conseguir con cada bombilla, foco, lampara...
En las siguientes lineas voy a intentar dar
algunos consejos que puede que os ayudan a elegir una bueno opción e intentar conseguir el ambiente que queréis lograr en vuestro hogar. Podéis partir de esta idea y después adaptarla a vuestros gustos y necesidades.
Tipos de iluminación
Existen diferentes tipos de iluminación según el espacio al que queramos darle luz. La
iluminación general, es la fuente principal de donde proviene la luz que generalmente suele estar por encima de la vista de los ojos. La luz puede provenir desde un aplique o desde una lampara que esté colgada del techo.
La luz focal se suele situar en puntos muy concretos de la habitación y suele tener una
gran intensidad. Por ejemplo es una buena opción para espacios de trabajo, ya que en estos lugares necesitamos una buena iluminación.
La iluminación de ambiente es como su nombre indica para crear un ambiente concreto.
Su función principal es decorar ya que no suele ser una fuente de luz muy potente. En este caso, se puede tener en cuenta el diseño de la lampara, porque su fin último es decorativo, no como en las dos anteriores que lo importante es que iluminaran bien.
El último tipo de iluminación es la meramente decorativa. Se suele utilizar para
destacar objetos. Un claro ejemplo de este tipo de iluminación son las lámparitas que suelen ponerse encima de de los cuadros para destacar su presencia.
Algunos consejos a tomar en cuenta
A pesar de que cada espacio de la casa necesita claramente un tipo de iluminación, es importante mantener una línea para dar sensación de unidad. Esa sensación de conjunto no solamente es algo estético, que también, es algo que evitará esos incómodos contrastes de espacios
mucho o poco iluminados.
Como se puede intuir, los espacios muy iluminados y con luces blancas dan sensación de vitalidad, energía... y es en esas habitaciones donde se carga la mayor actividad de nuestro hogar. Tendremos que elegir adecuadamente dónde la ponemos, porque también
puede causar fatiga visual.
Un buen reparto de la luz
Antes hemos comentado que la luz general no tiene que ser muy fuerte. Pero además de eso, es recomendable que en la medida de los posible, esa luz esté repartida en toda la habitación y que no se creen sombras que estropeen la estética de la sala. Algunos expertos también suele recomendar que la luz general se pueda
apagar y encender desde la entrada de la habitación.
Combinación de luces en espacios grandes
Sobre todo en espacio suficientemente grandes, puede ser interesante la combinación de las luces que he explicado más arriba. Por ejemplo
en un salón, se puede poner una lámpara de luz general, una focal en la parte donde tenemos la mesa de comedor y una luz de ambiente al lado del sofá que nos puede servir para relajarnos y crear un entorno más intimista.
Según como dispongamos las luces en un mismo espacio crearemos diferentes ambientes y sensaciones. incluso podemos utilizar diferentes focos de luz para crear y separar ambientes en una misma habitación. Es importante por tanto, que cada uno de ellas se pueda
encender y apagar de manera independiente.
¿Luz blanca o amarilla?
Además de los tipos de luz es importante elegir adecuadamente el color. Aunque parezca algo muy lógico o poco importante, es necesario elegir el mejor tipo de luz para cada espacio. La luz amarilla t
ransmite calidez, tranquilidad, serenidad... la luz blanca, sin embargo, son recomendables para espacio con mucha actividad y que necesitan estar bien iluminados.
Iluminación en los armarios
Seguro que enseguida se nos ocurre que una casa debe tener una iluminación y además nos parece completamente lógico que pensemos en
cómo podemos hacerlo. Pero quizás no se nos haya pasado por la cabeza, que también puede ser muy práctico iluminar un armario. Tener una armario con suficiente luz hace que encontremos las cosas mucho más rápidamente.
Existen diferentes posibilidades según su tamaño. Una opción puede ser colocar un tubo fluorescente en la parte más alta del armario para que ilumine el mayor espacio posible. La otra opción, cada vez más extendida y que algunos armarios ya incorporan de fábrica es colocar unos f
ocos halógenos en la parte superior y enfocarlos hacia las zonas que queremos iluminar.