Si el otro día os daba trucos de cómo
decorar con cojines hoy os hablaré de cuales son los
materiales habituales de relleno, ya que cada uno tiene unas características determinadas y dependiendo de ellas el cojín resultará más apropiado para el verano o el invierno, para darle trote o simplemente usarlo con una función decorativa, si será cómodo para recostarte en él, indicado para los niños, etc.
Fibra natural
Algodón: es uno de los rellenos preferidos desde siempre por sus innumerables ventajas: es suave al tacto y respetuoso con las pieles delicadas, motivo por el cual suele usarse como tejido para ropa de hospital y bebés. También es hipoalergénico, por lo que resulta muy indicado para las personas que sufren de alergia a los ácaros y al polvo. Es transpirable, por lo que circula el aire por su interior impidiendo la proliferación de hongos y bacterias en su interior.
El cojín con algodón es una
almohada improvisada muy fresca en verano y cálida en invierno porque es un tejido que absorbe muy bien la humedad (por eso se utiliza en toallas). Mullido y confortable, no pierde la forma salvo que se le someta a altas temperaturas ya que si bien las aguanta, encoge y se arruga.
Es una fibra natural no tratada con productos químicos, aunque en este aspecto es más ecológico el
algodón orgánico que está libre 100% de cualquier producto tóxico mientras que en el caso del algodón ordinario sí es cultivado con pesticidas, fertilizantes y luego se blanquea y tiñe con productos que pueden causar irritaciones a personas con piel excesivamente sensible. Pero como estamos hablando de relleno, esa sensibilidad debería ser extrema y estar en contacto directo con el relleno.
Pluma o plumón: Son caros pero muy cómodos, ya que mantienen el equilibrio perfecto entre firmeza y suavidad. Son duraderos, ya que si pierden sus propiedades las vuelven a recuperar en la secadora. Son muy cálidos y mullidos, el relleno más transpirable de todos los que existen, con todas las ventajas que eso comporta. Pierden la forma pero se recupera en seguida esponjándolos un poco. Las mayores desventajas además de su precio es que no se pueden lavar en lavadora y que, aunque tratados, pueden dar alergia a algunas personas.
Artificial
Espuma: La espuma es otro de los rellenos para cojines más utilizados desde siempre ya que es sencilla de tratar para rellenar, ya que sólo se requiere cortar una pieza del tamaño exacto del cojín, por lo que es perfecta para manualidades de cojines con formas redondeadas así como para cojines con formas originales ya que se pueden rellenar con tiras de espuma o espuma picada que se adaptarán mejor a la funda.
Resiste el aplanamiento y es material resistente, es por ello que suele usarse como relleno de cojines y almohadones de exterior, aunque precisamente por eso puede resultar un poco dura.
Desventajas: según el tipo de espuma, ya que hay de distintas calidades y algunas se deterioran rápidamente.
Poliéster: Es resistente y firme,aunque muy liviano. Admite lavado en lavadora y se seca rápidamente, en general no admite altas temperaturas salvo que sea fibra hueca de poliéster que sí permiten altas temperaturas en el lavado y mantiene su forma.
Cómodo y mullido, con la firmeza justa, indeformable y cálidos, porque no es transpirable, de ahí que no sea buen relleno para cojines de veraneo.
Es
hipoalergénico aunque,como a todo, también hay personas alérgicas si bien al contacto directo.
Dependiendo del
tipo de poliéster tendrá variaciones en las propiedades: algunos como la fibra hueca siliconada de marcas certificadas tienen alta recuperación, son hipoalergénicas, no tóxicas, transpirables y absorbentes y no se deforman con el tiempo. Otros, sin embargo, sí se deforman aplanándose en el centro.
Los que llevan mezcla de poliéster y viscoelástica se caracterizan porque son más firmes y recuperan con rapidez su forma gracias a la viscoelástica.
Perlas de poliestireno expandido (EPS): Es un material que suele rellenar cojines de lactancia ya que es duradero, hipoalergénico, higiénico, transpirable, ligero, tremendamente amoldable ya que el peso se distribuye por su superficie de bolitas según la forma del cuerpo y la presión ejercida. Como en todo, en este material también hay distintas calidades y algunas de ellas no tan resistentes ya que acaban aplastándose y quedando todo el material en un lado del cojín y no distribuido por todo su interior. No suelen admitir el lavado ya que pierden sus propiedades.
Ésta es la
punta del iceberg ya que cada vez hay más variaciones en las fibras sintéticas y dependerá de cada fibra en concreto y de si se ha mezclado con otra. Por eso si quieres tener la certeza infórmate bien de las propiedades del relleno concreto de los cojines que vas a adquirir.