La sensualidad de tener una chimenea... de verdad

Enviado por Interdigital el Sáb, 12/08/2017 - 02:42
Hace unos años era de obligado cumplimiento simular en los salones de los pisos el hueco de una chimenea forrada de mármol en la que los dueños colocaban madera, un caldero con su hogar y hasta un juego de chimenea con su pala, su atizador y su fuelle... ¿Que no me creéis? Os lo podría jurar... y no por snoopy, porque mi padre instaló varias de esas (es albañil) y le hizo una a mi madre... Así que sí, se llevaban hace unos años y era el último grito en decoración de salones... chimenea con leña ardiendo El fuego siempre ha atraído a la humanidad, hay algo muy sensual en él que nos hace perdernos en sus llamas. Por eso, el sueño de tener una chimenea es algo que llevamos muy hondo... tal vez por que la imagen ancestral que nos transmite de reunirse alrededor de la llama del hogar a estar en familia y contarse cuentos.

Placer y funcionalidad unidos

En la actualidad, tener una chimenea... que funciona... es un placer al alcance de muchos. La calidez del calor y la luz que emiten no tienen nada que ver con la de la calefacción de los aparatos eléctricos o de gas. Es otra forma de vivir y de relajarse. Es cierto que tiene el inconveniente de disponer de un lugar donde almacenar la leña o el gas y estar pendiente de llenar el depósito y la leñera... pero todo eso son minucias si pensamos en las noches que podremos disfrutar de una velada acunados por el siseo de las llamas.

Pon una chimenea en tu vida

Además, la gran popularización de las chimeneas ha ocasionado que el mercado se reactivara y ofreciera multitud de diseños para agradar a todo aquel que busque su chimenea ideal. Encastradas para evitar que los niños puedan meter la mano, imitando los estilos de distintas épocas, de líneas sencillas o con arabescos en los marcos. Multitud de estilos y diseños podemos encontrar en las tiendas especializadas.

En busca de la chimenea de nuestros sueños

Una chimenea en el salón presta un triple servicio, el de decoración, el de calefacción y el de relajación. Por eso, si estáis pensando en poner una chimenea en vuestro salón o en actualizar la que ya tenéis elegid una que os resulte cómoda, bonita y con una buena funcionalidad. Es importante consultar con los especialistas qué clase de chimenea se precisa para calentar el espacio en que se va a ubicar. Muchas veces se compra sólo por lo bonita que nos ha parecido y descubrimos muy tarde que no es capaz de calentar todo el espacio. Así que consultad y disfrutad del resultado.