Alacenas abiertas para una cocina sin secretos

Enviado por Interdigital el Sáb, 12/08/2017 - 02:07
Seguro que al ver el título de este artículo a más de uno y de una se le ha venido a la cabeza la voz de su madre o de su abuela avisándole de que no se abren las alacenas delante de los invitados. En muchas casas esto era una costumbre que supongo que trataba de evitar que los vecinos supieran que se tenía o no se tenía en casa y pudieran comentar en los corrillos. Sin embargo con los años las costumbres cambian y ahora una de las tendencias que vienen pegando fuerte es la de las alacenas abiertas. cupboard Cocinas en las que nada se esconde y todo se muestra ya sea para una mayor comodidad o para un mejor lucimiento de vajillas y cristalerías.

El orden es fundamental

Es cierto que para tener una cocina de estas características uno de los requisitos fundamentales es ser una persona ordenada. No hay nada peor que una cocina con todo al descubierto y colocado de cualquier manera. Pero para ayudarnos a que todo esté impecable tenemos muchos aliados que nos facilitarán la tarea de tener un lugar para cada cosa y cada cosa en su lugar. Las estanterías de cubos con nombres impronunciables que tan de moda ha puesto una famosa cadena de muebles son ideales para estas cocinas cuándo queremos darle un toque informal y urbano. Como este tipo de estanterías se pueden completar con cajones, cestas y puertas colocadas de forma salteada, no es necesario que se muestre todo y podemos ocultar las cosas más difíciles de mantener ordenadas mientras que mostramos aquello de lo que nos sentimos más orgullosos.

El estilo más rural

Para los amantes de un estilo más rústico resultan ideales las estanterías para platos en las que estos se colocan en pie sujetos por una barra de madera. Tanto para los útiles que se usan a diario como para colocar una vajilla de cerámica decorativa, este tipo de expositores son muy lucidos y muy cómodos de utilizar. En este estilo de cocinas resulta muy decorativo tener unas estanterías a la vista como la ya comentada de los platos, una a medida para los botes de especies o colgadores para las tazas y las copas. Las barras multiusos de hierro forjado en las que se pueden poner escurridores y todo tipo de ganchos para utensilios de cocina completan la zona descubierta de la estancia. Estos elementos se pueden combinar con un mueble rústico más práctico, totalmente cerrado, dónde se pueden guardar los paquetes de la comida, los cubiertos o los paños de cocina. En definitiva, la parte íntima y privada que casi todos seguimos necesitando en la cocina.