Siempre que pensamos en tocadores a la mayoría de personas les viene a la mente imágenes de princesas que se miran ensimismadas con su belleza mientras pronuncian aquella frase de “espejito, espejito...”. Sin embargo a mí me sugiere más el mundo de la farándula, cuando entre bambalinas se maquillaban las vedetes con esas kilométricas pestañas mientras se pintaban un lunar.
El caso es que el tocador es algo que se encuentra en semi peligro de extinción. Un mueble tan femenino unido al lujo y a la belleza de la mujer. Donde guardar miles de enseres tales como horquillas, cremas, perfumes y hasta joyas.
Sin embargo, esto no significa que se hayan dejado de diseñar. Existen aún empresas donde esta clase de mueble ha cogido un protagonismo especial. Si piensas que un tocador es algo pasado de moda, cursi o rococó, aquí te traemos una selección que te convencerán de todo lo contrario.
El equilibrio recae en un espejo central redondo, cuyo filo de acero está lacado en rojo. Un mueble que resulta atractivo por su sencillez y que viene acompañado por una banqueta forrada en cuero negro. Lo que completa el despliegue de materiales en esta pieza única.
Su exterior es de madera. Que en cada uno de sus cofres forma un mosaico diferente. Mientras en su interior encontraremos cuero de color avellana y otro de marrón oscuro. Los cuales se dividen en cómodos compartimentos. Una joya donde guardar el resto de tus tesoros.
Un elemento superior cerrado lacado en negro brillante, sustentado sobre unas patas. Que aparentemente es sobrio, pero cuando nos deja ver su interior nos muestra su grandeza. Ya que entre sus dorados corona una celosía de cristales de Swarovski.
Porque, como todo en la vida, todo depende del espejo en el que te mires.
La arquitectura coqueta
Para empezar os quiero mostrar una pieza de Chandlo, la firma que entiende la belleza como geometría, nos propone esta versión casi minimalista y limpia de lo que para ellos sería un tocador. Formado por una pieza de fresno macizo teñido de negro, sustentada por un grupo de cuatro patas cilíndricas pintadas de verde.
El equilibrio recae en un espejo central redondo, cuyo filo de acero está lacado en rojo. Un mueble que resulta atractivo por su sencillez y que viene acompañado por una banqueta forrada en cuero negro. Lo que completa el despliegue de materiales en esta pieza única.
El cofre de los tesoros
Como hemos dicho antes, el tocador es un mueble en el que guardar no solo secretos de belleza, sino también joyas. Por esta razón el joyero Jaime Tresserra nos propone que huyamos del tocador convencional y optemos por este “arca de los tesoros”. Un mueble compuesto por una consola y dos cofres superpuestos que, como no podía ser de otra forma, están franqueados por una cerradura de seguridad.
Su exterior es de madera. Que en cada uno de sus cofres forma un mosaico diferente. Mientras en su interior encontraremos cuero de color avellana y otro de marrón oscuro. Los cuales se dividen en cómodos compartimentos. Una joya donde guardar el resto de tus tesoros.
Rasgos asiáticos
Ya alguna vez hemos hablado de las características líneas de los muebles chinos, de su lacado y ángulos rectos. Pues en este caso ellos han servido de influencia para los diseñadores de la firma catalana The Narcissist.
Un elemento superior cerrado lacado en negro brillante, sustentado sobre unas patas. Que aparentemente es sobrio, pero cuando nos deja ver su interior nos muestra su grandeza. Ya que entre sus dorados corona una celosía de cristales de Swarovski.
Porque, como todo en la vida, todo depende del espejo en el que te mires.